2 Análisis especial: transferencias fuera de sitio para disposición final en América del Norte, 2014-2018
2.6 Conclusiones
El presente análisis especial de las transferencias fuera de sitio para disposición final por parte de las instalaciones industriales de América del Norte se propuso responder interrogantes relacionados con las sustancias y los volúmenes registrados, los sectores involucrados y la naturaleza de las prácticas de eliminación o disposición final de residuos empleadas. Diversas preocupaciones compartidas en torno a los riesgos ambientales y para la salud humana asociados con ciertos métodos de eliminación de residuos —particularmente cuando la responsabilidad de los desechos de una instalación se transfiere a un tercero o cruza fronteras internacionales— dieron lugar a la realización del análisis en cuestión. Se presenta información sobre las leyes y reglamentos pertinentes que rigen las prácticas de eliminación o disposición final de residuos, con el objetivo de comprender cómo se pueden minimizar sus riesgos.
Los datos registrados por las instalaciones, correspondientes al periodo 2014-2018, muestran que aproximadamente diez sectores industriales y el mismo número de contaminantes (o grupos de contaminantes) representaron al menos dos tercios del total de las transferencias fuera de sitio para disposición final cada año. Muchos de estos sectores principales (por ejemplo, minería de minerales metálicos, industria básica del hierro y del acero, fabricación de productos químicos básicos, extracción de petróleo y gas, y manejo de residuos) son comunes a los tres países; por lo tanto, los datos y la información correspondientes pudieron utilizarse para comprender mejor y abordar las necesidades y los desafíos que enfrentan las instalaciones en relación con la prevención de la contaminación y la implementación de prácticas de producción más sostenibles.
Sin embargo, los resultados del análisis revelan también importantes brechas (vacíos y omisiones) en el panorama regional de las transferencias para disposición final, producto de las diferencias en los requisitos de registro de los RETC nacionales en relación con dichos sectores principales (por ejemplo, la escasez o inexistencia de datos para las instalaciones de extracción de petróleo y gas y las plantas de tratamiento de aguas residuales en Estados Unidos y México), al igual que para algunos de los contaminantes que son típicos de estas actividades industriales. Como se mencionó, solamente alrededor de 70 contaminantes (o grupos de contaminantes) son comunes a los tres programas, con lagunas en el registro de sustancias clave como compuestos de zinc, manganeso y bario, fósforo total y otros, muchos de los cuales tienen el potencial de afectar negativamente la salud humana y el medio ambiente si no se gestionan adecuadamente.
Asimismo, este informe brinda ejemplos recientes de los riesgos asociados con cada una de las seis categorías de transferencias fuera de sitio para eliminación o disposición final examinadas. También destaca la dificultad de rastrear o dar seguimiento a los contaminantes desde su punto de origen hasta su eliminación o disposición final. Las razones para ello incluyen diferencias importantes entre los tres programas RETC en relación con el registro de transferencias para disposición final (por ejemplo, nivel de detalle proporcionado y terminología y definiciones únicas), junto con la responsabilidad compartida respecto de la aplicación de la normativa y el monitoreo de determinados tipos de residuos y prácticas para su manejo o eliminación industrial. Los datos disponibles —en particular, para las transferencias transfronterizas— apuntan a la necesidad de contar con mejores procesos de coordinación entre las dependencias relevantes, así como datos e información RETC más completos sobre el manejo de contaminantes, incluidos detalles precisos relativos a las instalaciones de origen y destino.
El análisis especial aportó también ejemplos de problemas relacionados con la calidad de los datos —como el registro de códigos de sectores industriales erróneos— que pueden tener un impacto importante en nuestra capacidad para comprender con precisión las actividades industriales en América del Norte y los contaminantes que generan y gestionan de alguna u otra manera. Tales cuestiones vinculadas a la calidad de los datos se están abordando como parte del esfuerzo de cooperación en curso entre la CCA y los tres RETC, basado en el intercambio de información y experiencias a fin de respaldar mayores comparabilidad, calidad y exhaustividad de los datos en toda la región.
Además de resaltar la relevancia de los datos e información de los RETC para rastrear los contaminantes industriales, el análisis especial del presente volumen de En balance ha demostrado que los RETC pueden servir como herramientas importantes para sensibilizar gobiernos, industria y otras partes interesadas, y respaldar su comprensión en relación con la producción sostenible. Por ejemplo, entre las barreras que suelen afectar la capacidad de las instalaciones para adoptar prácticas más sostenibles se encuentran la falta de conocimiento y financiación. A ello se suma una comprensión limitada por parte de las autoridades gubernamentales en torno a las necesidades de sectores específicos y las mejores formas de apoyarlos en su transición hacia la sostenibilidad. Reconociendo la importancia fundamental de contar con dicha información, los tres programas RETC nacionales han realizado mejoras recientes a sus requisitos de registro, con el objetivo de obtener datos que permitan aprender más acera de los esfuerzos de prevención de la contaminación, y otros, de las instalaciones, así como sobre los desafíos que enfrentan al respecto. Tal información se puede compartir entre los sectores industriales en toda la región, a fin de respaldar procesos de producción circular que, a su vez, minimizarán la generación y eliminación de residuos.